Los campanarios de la catedral, derribados por el terremoto de 1950, habían sido reconstruidos por cuenta del gobierno del general Franco y en prueba de gratitud se ordenó a la banda ejecutar el himno español. Sonaron los primeros acordes y se vio el bonete rojo del obispo encarnarse más aún mientras sus brazos se movían como los de una marioneta: "Paren, paren, hay un error", decía, mientras se vía la indignada voz de un gaita: "Dos años trabajando, ¡para esto!". La banda —no sé si bien o mal intencionada-, había iniciado la ejecución del himno republicano"
Ernesto "Che" Guevara, "Diarios de motocicleta"
No hay comentarios:
Publicar un comentario